Todos tenemos épocas en las que necesitamos alejarnos un tiempo de lo y los que nos rodean, tener un poco de espacio para nosotros y poder pensar.
Desde que te conocí me he sentido afortunada de tenerte en mi vida. Me he sentido afortunada de escuchar tus consejos, de que me equilibres.
Cuando me sentía perdida tu estuviste ahí y quiero devolverte un poco de todo lo que tú me has dado (sé que a veces me pongo muy pesada con mis movidas mentales y dan ganas de matarme.)
Este último año no ha sido nada fácil. Me cogieron, me tiraron al suelo, me rompieron, escupieron sobre mi y entonces me perdí. Me perdí de mí.
Soporté determinadas cosas porque pensaba que me las merecía. Cuando te están diciendo durante tanto tiempo que eres una mierda, que no vales nada, te lo acabas creyendo y haces cosas que nunca creerías que podrías hacer, pero logré salir de todo aquello. Reencontrarse con uno mismo, después de haberse perdido, se convierte en placer.
Estás pasando por una mala racha. Me dices que te sientes sólo, que no encuentras a nadie...
Hace poco me leí ''La mujer que no quería amar.'' No es un libro sobre psicoanálisis, son historias sobre nuestra vida cotidiana y en uno de sus capítulos dice así:

''¿Por qué algunos de nosotros intentamos eludir durante tanto tiempo la realidad? Muchas veces es porque enfrentarse a la realidad implica asumir la soledad. Y aunque la soledad puede ser útil porque nos motiva a conocer a alguien nuevo, por ejemplo, el miedo a la soledad puede funcionar como una trampa, encerrándonos en un sentimiento duradero de abatimiento.''

La soledad es necesaria. Encontrarse con uno mismo, conocerse para luego poder conocer a otros.
Si te soy sincera pienso que piensas demasiado, que buscas el amor desesperada e impulsivamente y que no logras ser feliz sin él.
No puedes hacer que tu felicidad dependa de la persona con la que estés porque, ¿y si esa persona se marcha? ¿Qué harás entonces? ¿Ser infeliz hasta que encuentres a la siguiente?
Estar solos no significa vivir sin amor. El amor tiene muchas formas y matices, la familia, los amigos, las aficiones...
El amor no se reduce a una pareja, está en todas partes. Sólo depende de nosotros si lo sentimos o no.

Llevas ausente mucho tiempo tanto conmigo como con otros. Dices que eso es un problema que tienes, que con ello has hecho que muchas personas que quieres se hayan alejado. Yo te digo que si es así que les den.
La amigos están para lo bueno y para lo malo. Cuando todo va bien es muy fácil quedarse, pero en el momento que tenemos algún problema la gente se va, y ahí es cuando ves realmente las personas que merecen la pena. Las que siguen a tu lado a pesar de todo, que comparten nuestra desgracia sin ser llamados.
A mí me tendrás para todo, ya sea bueno o malo. No importa si llevamos dos semanas sin hablar o tres meses, mi puerta nunca la verás cerrada.
Sé que no puedo hacer desaparecer de tu vida lo malo, pero cuando lo malo vuelva a aparecer estaré a tu lado.